De la mano de Lionel Messi y Luis Suárez, el Inter Miami de Gerardo Martino rescató un empate agónico ante Nashville por la ida de los octavos de final de la Concachampions 2024. Así, la serie quedó totalmente abierta de cara a la revancha, el 13 de marzo en DRV PNK Stadium
Desde el arranque, el encuentro se presentó adverso para las Garzas. Es que, a los cuatro minutos de iniciado el partido, el canadiense Jacob Shaffelburg adelantó a los locales luego de recibir una pelota de frente a Drake Callender y definir con un potente disparo alto, lejos de las manos del arquero. Los visitantes sintieron el golpe del tempranero gol y sufrieron más de la cuenta en varias oportunidades. Para colmo, no contaban con situaciones claras que permitan imaginar un empate en el primer tiempo.
Como si ese gol hubiese sido poco, el segundo mazazo llegó apenas iniciado el segundo tiempo, cuando Shaffleburg aumentó su cuenta personal con un verdadero golazo al minuto de juego. Así, Nashville se encaminaba a la victoria e Inter Miami parecía dormido en el campo de juego. Sin embargo, el despertador sonó y lo hizo de la mano de Lionel Messi, quien con un sutil remate de zurda marcó el descuento para las Garzas y buscó despertar a sus compañeros. La reacción llegó y lo hizo de los dos lados: primero, con un gol anulado a Inter Miami por un offside de Diego Gómez; después, por otro tanto anulado, esta vez para Nashville, por una posición fuera de juego de Shaquell Moore.
Más allá del gol, Messi tuvo un partido muy activo y en el que se lo vio particularmente molesto con los rivales. El momento de mayor polémica llegó cuando, a los 32 minutos, Lukas MacNaughton le metió un tremendo planchazo que dejó a Messi tirado y solicitando la asistencia médica. Afortunadamente, Leo no sufrió lesión alguna, pero tanto él como Martino se mostraron molestos con el árbitro, quien no sancionó la jugada.
Al margen de ese momento de calentura, la sonrisa volvería a aparecer en el rostro de Messi de la mano de Luis Suárez. Es que el uruguayo se encontró con un centro en el minuto 50 del segundo tiempo y, tras un remate de cabeza, puso el 2-2 definitivo en el marcador que desató la celebración de todo Inter Miami. Así, la serie quedó totalmente abierta de cara a la revancha, que se jugará el miércoles 13 de marzo, en el DRV PNK Stadium.
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