El Museo Rivadavia y un plan para revalorizar la estructura abandonada en un sitio estratégico
“No nos vamos a desprender del lugar”, dijo Luis Cappozzo, director del Museo de Ciencias Naturales Rivadavia, dueño del predio lindante a la plaza 3 de Agosto. Explotación conjunta con la comuna
RAÚL JÁUREGUI
Redacción
Desde hace largo tiempo, quizás desde los 80 cuando se paralizó la construcción de una moderna Estación Hidrobiológica, muchos se preguntan ¿de quién es la estructura de cemento abandonada en el estratégico predio contiguo a la plaza “3 de Agosto” y qué destino tendrá la misma?
Las respuestas las tienen en las autoridades del Museo Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia” (con sede en CABA), propietario del predio de 6.000 metros cuadrados, institución que está bajo la órbita del Conicet.
El director del museo más antiguo del país, Luis Cappozzo, aclaró a Ecos Diarios que “no nos vamos a desprender del lugar”.
El citado investigador se hizo presente ayer en nuestra ciudad, y acompañado por el director de la Estación Hidrobiológica, Gustavo Chiaramonte, mantuvo una reunión con el secretario de Gobierno y la delegada municipal en Quequén, Jorge Martínez y Silvia Jensen, respectivamente, ocasión en la que se empezó a perfilar el plan conjunto para el verano.
“La idea es poner juntos en valor el lugar para que en este verano no luzca abandonado y brindaremos allí un servicio para la comunidad, que contempla una playa de estacionamiento; y por nuestro lado ofrecerle al público alternativas vinculadas con la educación, por caso con exposición de material del Museo, entre ello de réplicas de dinosaurios en tamaño natural”, indicó Cappozzo.
Luego agregó que “así conseguiremos fondos genuinos para mantener el predio; y el año que viene haremos un estudio para ver si esa estructura es viable para recuperarla o hay que derrumbarla”.
Para este verano se prevé el mejoramiento integral del predio, incluyendo un sensible avance en las luminarias del lugar y es resguardo de seguridad para que no se pueda ingresar a la estructura de cemento.
Sin perder la identidad
Cappozzo resaltó la importancia de la Estación Hidrobiológica de Puerto Quequén, que pertenece al Museo Rivadavia, al decir que “fue la primera estación de biología marina de América del Sur, empezando a funcionar en 1928, y los primeros artículos científicos sobre peces del Mar Argentino salieron de esta estación”.
En ese marco, el investigador dejó en claro la postura del Museo respecto a la estructura de la avenida 502, al decir que “el corazón del Museo son nuestros investigadores y desde siempre nuestro objetivo es brindarnos a la comunidad de Necochea y Quequén, mantener los recursos científicos y potenciar el uso de la zona marino costera y en ese conjunto de cosas nuestras también entra esa propiedad”.
Luego apuntó que “ese predio es un lugar emblemático, Quequén creció mucho y a nadie le interesa que ese lugar siga así”.
Seguidamente destacó que “siempre nos vamos a sentar con la comunidad para decidir el futuro del predio y si hay algún privado interesado hablaremos, pero sin perder los objetivos del Museo de informar, educar y facilitar allí conocimiento, entre otras cuestiones”.
El predio de la 502 le fue cedido a la Provincia de Buenos Aires en 1971 por el municipio de Lobería, por entonces con Quequén bajo su jurisdicción, con el fin de construir una estación hidrobiológica modelo con laboratorios y acuarios con agua marina; mientras que al año siguiente, mediante la Ley provincial 7.633, le fue traspasado el dominio al Museo de Ciencias Naturales. Pero la obra quedaría paralizada por “malas administraciones”.
Propuesta al Consorcio
Si bien hasta ayer no hubo un contacto directo con la titular del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, Jimena López, desde hace años está latente una idea para que el ente portuario tenga presencia directa en el predio lindero al mar.
Al respecto, Gustavo Chiaramonte recordó que “en 2011 el Consorcio nos planteó su interés de armar un proyecto que pusiera en valor el edificio, pero en ese momento no prosperó”.
Luego apuntó que “ante nuestra preocupación de que se produjera algún accidente en la estructura abandonado, el Conicet planificó el alambrado perimetral del predio, lo que tampoco se concretó, porque en ese tiempo no había precisión en cuando a documentación de la propiedad del lugar, que recién se confirmó en 2019”.
Luis Cappozzo, quien por varios años dirigiera la Estación Hidrobiológica de Quequén, anticipó que “vamos a iniciar conversaciones con el Consorcio, que es un actor más que importante, para ver si tiene intenciones de sumarse al proyecto; y por otro lado ordenar juntos el tema del uso y cuidado de la fauna marina (lobos y ballenas) que están bajo su jurisdicción, con fines turísticos”.
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